29 septiembre 2016

Peña Prieta y Tresprovincias desde San Glorio

Llevaba tiempo con ganas de acercarme a Peña Prieta, aceptado por muchos autores - y con el permiso de las más altas cimas de los Picos de Europa - como el verdadero techo de la Cordillera Cantábrica, y aunque la visita al Macizo de Fuentes Carrionas desde Asturias es siempre en viaje largo y pesado, algún día había que cometer el exceso. De entre las posibles rutas elegí partir del puerto de San Glorio, quizás uno de los accesos más habituales, ya que me daría la oportunidad de conocer la zona norte del macizo y cerrar una guapa circular, en la que tendría la estupenda compañía de Santiago.

21 septiembre 2016

Portillin Oriental y cresta Fontanes-Siete

Si había una cumbre a la que le tenía ganas en Ubiña era el Portillín Oriental, al que hace años le había metido un infructuoso tiento. Bien lo sabía Jose (Nuestras Montañas) con quien ya había hablado el verano pasado para intentarlo yo y repetir ascensión él (40 años después). Finalmente la ruta nos la programó Monchu (Monchu x Montaña) pero no iba a quedarse solo en el Portillín, que sería un mero aperitivo. El plato fuerte vendría despúés, con el recorrido de la cresta que une las cumbres de Los Fontanes y El Siete.

13 septiembre 2016

El Pienzu por el Babú

La primera vez que vi un reportaje sobre la crestería nororiental del Sueve, para ascender al Pienzu pasando por el Babú, fue hace años en el blog de Santos. Algún año coincidiamos durante unos días de vacaciones por Colunga y habíamos hablado de hacer la ascensión al Pienzu desde ese lado, quizás volviendo por el hayedo de La Biescona, o por el Texedal del Sueve, que yo de aquella aún no conocía. Por desgracia Santos nos dejó va a hacer dos años y nunca llegamos a compartir aquella ruta. El verano pasado no nos dejamos caer por Colunga, pero este año si y yo ya sabía a que iba a dedicar una mañana. Se la debía a Santos.

05 septiembre 2016

Cabezo Llerosos desde Buferrera

El año pasado había ascendido a la Peña Jascal pasando sobre el precioso valle del Jascal, tan precioso que me prometí volver con más tiempo para recorrerlo entero. La idea era cerrar un circuito que también me permitiera visitar la no menos sorprendente majada de Beresna. Entre ambos quedaba la inmensa mole del Cabezu Llerosos, una disculpa perfecta para volver a una cumbre a la que tan solo había subido desde La Molina. La invitada sorpresa fue la niebla que me alcanzó ya de bajada impidiéndome disfrutar de buena parte de la ruta.